La aerolínea estadounidense Alaska Airlines ha decidido inmovilizar sus aviones Boeing 737 MAX 9 después de que un avión con 177 personas tuviera que realizar un aterrizaje de emergencia en Estados Unidos poco después del despegue debido a la caída de parte del avión. «Tras el accidente de esta noche en el vuelo 1282, hemos decidido dejar en tierra temporalmente nuestra flota de 65 aviones Boeing 737-9 como medida de precaución», anunció en un comunicado el director general de Alaska Airlines, Ben Minicucci.
El vuelo despegó de Portland, en el noroeste de Estados Unidos, a las 17:00 hora local del viernes, con destino a Ontario, California, pero tuvo que regresar unos 20 minutos después tras reportarse «un problema de presurización», según se informó. La empresa La Administración Federal de Aviación de Estados Unidos (FAA) en la red social parece un agujero para una puerta de emergencia, aparentemente no habilitada. En el interior del avión, parte de la pared de la cabina también resultó rota, dejando al descubierto el material aislante.
Un pasajero del vuelo, Kyle Rinker, le dijo a CNN que la ventana explotó poco después del despegue. «De repente escuché un fuerte golpe», dijo Elizabeth Le, otra pasajera, en una entrevista con el canal local KCAL News. “Entonces miro a mi izquierda y veo un pedazo enorme, una parte del avión que faltaba y el viento era sumamente fuerte. «El viento soplaba por todas partes, pero todos estaban en sus asientos», añadió.
Según testigos citados por los medios estadounidenses, nadie ocupaba el asiento más cercano al hueco. En los asientos del medio y en el pasillo había pasajeros, quienes fueron trasladados a otra parte del avión con ayuda de las azafatas. El avión fue certificado en octubre, según los registros de la FAA disponibles en línea recogidos por la agencia AFP.
Los asistentes de vuelo describieron la descompresión como «explosiva» y un asistente de vuelo sufrió heridas leves, según la Asociación de Asistentes de Vuelo de Alaska Airlines. «La situación podría haber sido catastrófica sin la habilidad y el profesionalismo excepcionales de las azafatas y los pilotos», dijo en un comunicado. En el vuelo viajaban 171 pasajeros y 6 tripulantes.
El accidente amenaza con volver a poner a Boeing y su modelo 737 MAX en el ojo de la tormenta después de que le retiraran el permiso de vuelo en 2019 -el fabricante estadounidense incluso suspendió la producción- tras dos accidentes mortales que le costaron la vida. 300 personas. En octubre de 2018, el vuelo se estrelló en el mar de Java, Indonesia. 610 de la aerolínea de bajo coste Lion Air operaron con un 737 MAX 8; Unos meses más tarde, en marzo de 2019, 157 personas murieron en el vuelo 302 de Ethiopian Airlines en el mayor desastre aéreo de ese año: el modelo del avión era el mismo.
La investigación iniciada tras los dos accidentes reveló fallos en el diseño del sistema de estabilización del modelo (MCAS) y que la compañía, a pesar de haber asegurado que los 737 MAX eran tan seguros como cualquier otro tipo de avión, era consciente del fallo. Por engañar a los inversores, la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC) multó a la empresa con 200 millones de dólares y multó con otro millón a su ex director ejecutivo, Dennis A. Muilenburg. La FAA mantuvo su prohibición de vuelo del 737 MAX hasta noviembre de 2020.
«Ningún avión volverá a volar hasta que se completen todas las inspecciones de mantenimiento y seguridad», añadió Minicucci de Alaska Airlines en la nota, estimando que llevaría algunos días. Boeing, por su parte, publicó un mensaje en X en el que asegura que se encuentra investigando lo sucedido. “Somos conscientes del incidente que involucró al vuelo #AS1282 de Alaska Airlines. Estamos trabajando para recopilar más información y estamos en contacto con nuestro cliente de la aerolínea. «Un equipo técnico de Boeing está listo para apoyar la investigación». La FAA y la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB) también anunciaron que investigarán el caso.
El 737 Max es el avión más popular de Boeing y su principal fuente de ingresos. Los aviones de pasillo único como el Max y su correspondiente familia Airbus SE A320neo se utilizan con mayor frecuencia en rutas cortas. Hay aproximadamente 1.200 aviones 737 Max en vuelo, pero la gran mayoría son de la variante 737 Max 8, seguida del 8-200, mientras que son poco más de 200 de la variante que sufrió el accidente, el 737 Max 9. Alaska Air es el segundo operador de la variante 737 Max 9, detrás de United Airlines, con alrededor de 80. Otras aerolíneas que operan esta variante son Copa Airlines, con 29 unidades, y Aeroméxico, con 19. Así lo afirmó FlyDubai, propietaria de tres aviones Boeing Max 9. estaba al tanto de la noticia y dijo que sus aviones tienen una configuración de cabina diferente a la del modelo Alaska, informa Bloomberg.
El 737 Max tiene un diseño de fuselaje modular que permite instalar puertas de emergencia de forma más variable dependiendo del número de asientos. Esto brinda a los operadores una mayor flexibilidad en la configuración de la cabina. En el 737-9 Max, Boeing incluye una puerta de salida de cabina detrás de las alas, pero antes de la puerta de salida trasera. Se activa en configuraciones de asientos densos para cumplir con los requisitos de evacuación. Según Bloomberg, las puertas no se activan en los aviones de Alaska Airlines y están permanentemente cubiertas.
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